Enamorados para toda la Vida


ENAMORADOS PARA TODA LA VIDA.



La Sagrada Escritura habla del matrimonio, en el primer libro de la Biblia (Génesis) se empieza con una boda, la de Adán y de Eva, el último libro Apocalipsis termina con la gran cena de las bodas del cordero, Jesús se identifica como el esposo y la iglesia como la novia.

Dios dice en Génesis, "por lo tanto dejará el hombre a su padre y a su madre y se unirá a su mujer y serán una sola carne". Y con esto el Señor hace la relación más sobresaliente de todas las relaciones, más que madre e hijo, más que el hombre y sus amigos, más que el hombre y su pastor.

En este texto hay tres principios dinámicos que garantizan la felicidad del hombre y la mujer:


1. Dejará el hombre a su padre y a su madre
2. Se unirá a su mujer
3. Serán una sola carne.

El primero habla de separación emocional, se puede vivir cerca de sus padres, pero debemos cortar el cordón umbilical,

El segundo habla de permanencia, uno se debe casar pensando hasta que la muerte nos separe, muchos se casan pensando hasta que el amor se nos acabe, si el amor disminuye, con la ayuda de Dios uno puede reavivar o restaurar el amor. Dios es real, y cuando uno decide buscarlo El puede restaurar nuestro matrimonio.

El tercer punto habla de unidad, que no es uniformidad, habla de intimidad, es interesante saber lo que los líderes de la iglesia pensaban de la intimidad durante los primeros siglos, en los siglos dos y tres los padres decían que la mujer es una especie peligrosa, representan una tentación para el hombre, y los héroes de la iglesia tomaban votos de pobreza y castidad, para ellos la santidad era cuidarse de las mujeres, pero esto no es lo que Dios piensa.

La Biblia habla claramente acerca del matrimonio, en proverbios 5:18 dice bendita sea tu propia fuente, alégrate y gózate con la compañera de tu juventud, como cierva amada y graciosa gacela, sus caricias te satisfagan en todo tiempo y en su amor recréate siempre. Aquí Dios no se refiere a una sirvienta sino aun venadito, delicado.

En hebreo la palabra recréate, significa estar intoxicado con el amor de su esposa, así que ¡¡sí es posible tener una aventura romántica con su cónyuge para toda la vida, aún después de 50 años de edad!!.

Uno se pregunta ¿si Dios diseñó el matrimonio para que fuera maravilloso durante toda la vida, por qué hay tanto divorcio y tanta infidelidad? Es por egoísmo, es por la autorrealización, mi felicidad, mi vida, cuando uno se casa debe tener otra actitud, si todo el tiempo estamos pensando en el bien del otro, sería diferente.

El mundo dice preocúpate por ti mismo, pero Dios dice dad y se os dará, someteos los unos a los otros, buscad primeramente el reino de Dios y lo demás será añadido.

La mujer a veces se casa esperando que el esposo supla todas sus necesidades emocionales, pero eso no es posible que lo haga un humano, otras veces se casa pensando que todo va ser diversión y resulta que no es así.

El elemento más significativo de los matrimonios que tienen muchos años de casados es una consecuencia de vivir en el siglo del niño, eso significa que durante muchas décadas la relación madre-hijo ha sido enfatizada con tal fuerza, que por causa del niño las prioridades de los esposos muchas veces han sido dejadas a un lado. Muchos esposos dicen yo tuve una buena esposa hasta que nació mi hijo y se volvió más madre que compañera, mal hecho, no debe ser así.

El matrimonio es permanente, sin embargo la maternidad es pasajera, los hijos se irán de casa y después se quedan dos extraños en casa porque no hay una relación entre lo esposos. El matrimonio continua siendo la prioridad cuando vienen los hijos y la mujer que no lo hace así está destruyendo una relación que debe permanecer toda la vida.

Los niños deben de ver a mamá y papá felices, deben de ver enamorados a los padres y que esta relación debe ser la prioridad.

Otro factor que nos roba la felicidad es nuestra ignorancia del plan de Dios para el matrimonio en efesios 5 dice "someteos unos a otros en el temor de Dios". El temor debe ser el centro de nuestro matrimonio, más adelante sigue diciendo las casadas estén sujetas a sus propios maridos como al Señor, porque el marido es cabeza de la mujer así como Cristo es cabeza de la iglesia, la cual es su cuerpo y el es su salvador, maridos amad a vuestras mujeres así como Cristo amó a la iglesia y se entregó así mismo por ella, así también los maridos deben amar a sus mujeres como a su mismo cuerpo, por eso dejará el hombre a su padre y a su madre y se unirá a su mujer y serán una sola carne.

Vamos a enfocarnos en un principio del hombre y uno de la mujer. Dios dice a los esposos que amen a sus esposas como Cristo amó a la iglesia, y Cristo amó a la iglesia con amor incondicional, Dios te ama aún en tus pecados, el quiere a través de Jesús tener una relación contigo.

El hombre debe amar a su esposa como siervo, este es el camino hacia un amor que dure toda la vida, también Cristo amó con amor sacrificial, el se entregó a sí mismo, dispuesto a sufrir. Hombre así debemos ser con nuestras esposas, tenemos que aprender que nuestras esposas necesitan oír de nosotros te amo todos los días y varias veces al día.

El matrimonio es muy importante para Dios en Deuteronomio dice: cuando fuere uno un recién casado no saldrá a la guerra ni en ninguna otra cosa se le ocupará, libre estará en su casa por un año para alegrar a la mujer que tomó. Esto nos muestra la gran importancia que Dios le da al matrimonio.

El hombre tiene que comprender la naturaleza de su mujer, tenemos que entender que ella requiere más tiempo de preparación y de caricias y de expresión de amor, si no lo entendemos vamos a robar a nuestra esposa y a nosotros mismos de una experiencia satisfactoria, las relaciones sexuales sin señales de amor, crean resentimiento y no una respuesta positiva por parte de su cónyuge.

El Amor no empieza en la cama en la noche, empieza con palabras de amor, de cariño, de ternura, de respeto por la mañana. El individuo no es el mayor en el matrimonio, es la unión, la pareja, y los hombres deben aprenderlo.

Tenemos que considerar las necesidades de la mujer, cuando leemos en efesios 5 que los hombres deben amar a su esposa como cristo amó a la iglesia, no significa que debe amarla si ella es cariñosa, sumisa, si le atiende, si no pierde su figura. Únicamente el hombre que ha experimentado el amor incondicional de Dios, tiene la capacidad de amar con esta clase de amor, así mismo la mujer.

La mayoría de los hombres no saben como hacer feliz a una mujer, no es el dinero, diamantes, casas, viajes simplemente el amor, ternura, comprensión, reconocimiento de parte de su esposo, la muestra de que el no está completo sin ella.
Otros ladrones que vienen a robar nuestra felicidad son la pornografía, infidelidad, esto causa un daño tremendo al matrimonio, y el esposo que ha cometido esto debe entender que va llevar tiempo para que ella tenga confianza en él otra vez.

Ahora vamos a hablar acerca del papel de la mujer dentro de matrimonio, Dios dice que es una ayuda idónea para su esposo, esto es que la mujer sea fiel, digna de confianza, cumplida con las responsabilidades de la casa, diligente, creativa, buena administradora del dinero sea poco o mucho, cuidando su belleza, tanto interior como exterior, la mujer debe respetar a su marido, honrarle, admirarlo, darle su lugar.

Hombre Dios habló de la mujer como ayuda idónea, esto significa igual, si crees que es inferior estás muy equivocado, son inteligentes, hay cosas que ellas pueden hacer y que los hombres no, permítele a la mujer hacer esas cosa en las que Dios la hizo hábil.

La intimidad espiritual, es importante en el matrimonio, si esto no existe todos los consejos van a ser muy difíciles de seguir, el hombre y la mujer como matrimonio necesitan intimidad con Dios. Este mundo está lleno de cosas que destruye, pero en Dios tenemos fortaleza.

1 comentarios:

Jess_89 dijo...

Me alegra mucho que tomes parte de tu tiempo para redactar estas entradas, yo intentare tener en cuenta lo que acabo de leer cuando sea mi momento.

Podrías escribir acerca del noviazgo :D

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